El hostal necesita una gran reforma, está todo bastante viejo y mal decorado, no es nada acogedor. Además el olor a cañerías en la habitación y en el baño era insoportable, además de un fuerte olor a comida. No funcionaba el teléfono de la habitación, ni había secador de pelo. En conclusión, un hostal para no recomendar. Lo único bueno que tenía era la ubicación en el centro de la ciudad, que era inmejorable.