En general la habitación estaba bien, era amplia, luminosa, bastante bien decorada, el edificio muy bien ubicado cerca de muchos puntos claves de la ciudad. Sin embargo encontramos el control remoto de la TV y botellas vacías debajo de la cama, así como una libretita escrita a mano con las instrucciones de cómo utilizar los electrodomésticos y demás artículos de la habitación o apartamento. El WIFI era muy lento y las toallas en el baño no eran muy nuevas, bastante desgastadas la verdad. La persona que nos recibió en el lobby para hacer el check out no tenía claras las reglas de uso (pregunto en la recepción sus dudas) y no nos permitió utilizar las instalaciones (piscina) del hotel luego del check out practica o cortesía muy común en todos los hoteles del mundo (a pesar de la respuesta positiva de la recepcionista...). La verdad no volvería a alojarme allí, buscaría otras opciones antes de volver.