Dicen que tienen camas queen y matrimoniales y sale que solo tienen matrimoniales en todo el hotel. Nosotros pagamos por una habitación con cama queen, que es más cara, y cuando llegamos a l habitación lo que había era una cama matrimonial, bajamos para que nos cambien la habitación y nos dijeron que no había queen, no enseñaron otras habitaciones y efectivamente no existen las camas queen en ese hotel, pero si te la ofrecen. Engañan a la gente
Por otro lado la comida es un asco. Todo es de bote, jugos de puro jarabe hasta un caldo tlalpeño parece que solo le habían vaciando la lata de chiles. Se pidió algo para tomar no tenían, se pidió postre no tenían. Toda la comida una imitación de comida mexicana, todos los alimentos de la peor calidad.
El agua del grifo de la habitación salía como amarilla, no transparente.
Las vistas de lo peor, viendo hacia un montón de tubos por la refinería.
En ese pueblo se están terminando los árboles por tanta tala.
Nadie te ayuda a su ir tus maletas. Para no regresar nunca a ese hotel.
Un engaño total, te cobran más por lo mismo. Y luego te quieren convencer de que la cama es más grande cuando uno está viendo que es del mismo tamaño. Te quieren quieren ver la cara de tonto.