Buen hotel, con las habitaciones muy correctas, bien aisladas, y al menos la que me tocó a mi, muy cómoda con cama doble.
En plena ola de calor con 44º exteriores, el aire acondicionado no falló, y siempre se mantuvo la habitación en temperaturas agradables.
Lo único negativo como de costumbre es la ducha, cuya configuración con un murete muy corto hace que el baño se empape.
El hotel se encontraba de reformas, si bien todo funcionaba excepto que solo había un ascensor. No afectó a la calidad del resto del servicio.