He de reconocer que la ubicación del Hotel me preocupó, la zona no es que sea muy turística pero tener a pie de calle el metro es toda una ventaja. El Hotel es muy bonito estaba todo decorado con luces Navideñas, el personal es encantadora, especial mención a la recepcionista del turno de mañana y al Señor que está en la puerta que nos recomendó el Zoo y el parque ¡Que simpático y encantador! La habitación fue amplia y muy cómoda. Sólo cogimos desayuno así que no podemos opinar sobre el restaurante pero el Buffet tenía de todo, mi hijo disfruto mucho, muchísimo. Muy cerca del Santiago Bernabeu ideal para nosotros que veníamos a disfrutar del Real Madrid. ¡Volveremos!