El hotel es espectacular, han conseguido que viajes en el tiempo a los aรฑos entre 1920-1930.
El servicio es exquisito e insuperable.
Desde que llegas a recepciรณn que con delicadeza te preguntan,si quieres q te aparquen el coche o te ayuden con el equipaje. Hasta una copa de cava o agua.
Nos ofrecieron una habitaciรณn a la que habรญamos reservado por 44โฌ ,pq la piscina no estaba incluida y eran 49โฌ la entrada.
(Si tenรฉis gorro puscinero que no se os olvide o pagarรฉis 2โฌ mรกs).
El hotel estรก hecho en la reconstrucciรณn de un edificio emblemรกtico, han conseguido que no pierda la esencia de la estaciรณn mas bonita de Espaรฑa,en un entorno idรญlico entre montaรฑas del Pirineo.
La Junior Suite totalmente recomendable.
Por poner un pero, el baรฑo tiene rsdiador- toallero que sol lo encienden de 19 a 23, para una persona friolera hace un poco de frรญo. Los armarios tienen luz intetior lo cual se agradece. El servicio es exquisito. Nos preguntaron por la tarde si neceditabmos algo en la habitaciรณn.
El desayuno es de 10. Buffet y algunos platos se pueden elegir a la carta.
La piscina esta muy bien, sin ser spa.
La cocterleria es muy curiosa, no pongo el nombre para no desvelar todos los rincones sorprendentes de este maravilloso hotel.
Pongo unas fotos, pero no todas para que os animรฉis y disfrutรฉis de este alojamiento en el Pirineo Aragonรฉs.
Un regalo especial muy romรกntico.