El hotel esta en una zona céntrica pero a pocos metros hay 2 establecimientos que venden cerveza y tienen música fuerte, ambos, uno enfrente del otro, cual competencia de bocinas. Las habitaciones son de buen tamaño y tienen televisión con cable, el baño esta un poco descuidado, el agua de la regadera salía directa del tubo y del inodoro todo el tiempo se filtró el agua, también había un poco de moho en el baño en general.
La atención de la recepción fue excepcional y muy útil.
La encargada del desayuno podría ser un poco mas amigable, pero el desayuno es rico, muy buen café.